Atención temprana (0-6 años)
Se puede realizar una intervención preventiva a partir de los 24 meses en aquellos niños que no han desarrollado el lenguaje o tiene un retraso en la adquisición del mismo (usan pocas palabras y/o se perciben dificultades en la comprensión de órdenes sencillas). Pero el diagnóstico definitivo no se puede estableces hasta más tarde (entre los 5 y los 7 años) ya que el retraso en la adquisición del lenguaje se puede deber a otras circunstancia. En edades tempranas se puede confundir con retraso de lenguaje simple o con un Trastorno del Espectro Autista. Aun así, es importante llevar a cabo una intervención temprana de estos niños con el fin de aprovechar la plasticidad cerebral característica de esta edad que favorece que aprendan de forma más rápida.