Buscamos que cada niño/a se enfrente a retos que sean adecuados a su nivel, lo suficientemente estimulantes para motivarlo, pero sin generar frustración. Para lograrlo, adaptamos cada actividad a su ritmo y estilo de aprendizaje.
Utilizamos una gran variedad de materiales manipulativos, juegos y dinámicas activas que favorecen el aprendizaje desde la experiencia y el disfrute. Estos recursos permiten trabajar de forma práctica y significativa.
Cada sesión está pensada para ser dinámica, flexible y personalizada. Observamos constantemente cómo responde el niño/a, ajustando las propuestas según sus intereses, necesidades y evolución. De este modo, fomentamos su participación activa, la autonomía, el pensamiento crítico y el gusto por aprender.
Además, trabajamos con objetivos claros, previamente definidos, que guían nuestras intervenciones. Mantenemos un seguimiento continuo para valorar los avances y ajustar las estrategias cuando es necesario.